Bitácora. El amor en la Dominación/sumisión

La última vez que publicamos una entrada hablando sobre nosotros, hacía un año y medio que alhena vivía a mis pies, Yanae y chiki ya cumplían más de tres y mi relación de pareja con Yanae tenía diecisiete.

Avanzábamos llenos de energía y satisfechos... en aquellos tiempos dormíamos los cuatro juntos en una cama de 4x2 y solíamos hacer muchas cosas juntos.

Durante estos diez años que han transcurrido desde entonces me han pasado muchas cosas y voy a intentar hacer un resumen...

Yanae y yo seguíamos enamorados y nuestro amor era suficientemente fuerte como para poder hacer ciertas concesiones. Decidimos dormir en habitaciones separadas en favor del pragmatismo y la intimidad con nuestros sumisos y muy despacio, casi sin darnos cuenta fuimos dejando de hacer cosas juntos... con los años, nos hemos ido centrando en nuestras relaciones D/s y un día nos dimos cuenta de que, aunque nos queremos muchísimo, ya hace un par de años que no estamos enamorados y que no somos pareja.

Seguimos viviendo juntos los cuatro y no tenemos intención de que eso cambie. Hace veintisiete años que Yanae y yo somos compañeros de vida y los dos estamos de acuerdo en que nuestro amor ha ido evolucionando de forma natural. Reconozco que de vez en cuando me pongo un poco triste al pensarlo, pero lo cierto es que no he sufrido, en ningún momento, ese sentimiento de pérdida que provocan las rupturas.

A esencia, mi primera sumisa, la quise mucho y aunque aquella relación no llegó a los tres años, con ella experimenté muchas cosas por primera vez, cosas tan trascendentales como la plenitud que todo Dom siente al ser Amo o Ama por fin. La quise mucho pero jamás me enamoré de ella.

Estas cosas no se deciden, simplemente ocurren... y alhena y yo no tardamos en enamorarnos ... aunque está claro que en una relación D/s no es necesario este tipo de amor, al contrario de lo que muchos piensan, amar a mi sumisa no redujo mi Dominación en ninguno de sus aspectos, es más, me otorgó ciertas herramientas muy útiles, sobre todo en lo que respecta a la confianza.

La confianza es la columna vertebral de todas las relaciones que valen la pena, y en la D/s, que se cede el control y se “arriesgan” la integridad física y mental, adquiere una especial importancia.

Durante los siguientes años, alhena y yo seguimos avanzando en la D/s y consolidando nuestro amor al mismo tiempo.

Llegamos a un punto en el que yo me sentía en mi mejor momento como Amo. A pesar de que habíamos ido reduciendo la frecuencia de nuestras sesiones, su entrega era mucho más profunda, habíamos aprendido a deshacernos de lo que menos significaba para nosotros como algunas normas de protocolo, conocíamos nuestros puntos fuertes y mi control era mucho más sencillo.

Era el momento de dar un paso adelante, decidí introducir a una segunda sumisa en nuestra relación y con el apoyo absoluto de alhena, comencé a buscarla. Volví a participar en foros y regresé al chat de #Mazmorra... conocí a muchas 

personas interesantes y con la calma que da tener las necesidades cubiertas fui conociendo bastantes sumisas, algunas personalmente, con unas pocas tuvimos encuentros, incluso llegué a poner un collar que, por desgracia, fue muy fugaz, pero una bonita experiencia.

La compatibilidad era más complicada que nunca ya que mi segunda sumisa tenía que congeniar, en diferente grado, con cuatro personas, así que la búsqueda nos llevó casi un año.

A finales de la primavera de hace ocho años, mi nueva sumisa vino del norte a vivir con nosotros, trayendo nuevas sensaciones, emociones y retos. Para mi, como Amo, comenzó el mejor momento de mi vida... alhena y yo recuperamos con creces nuestra libido y la frecuencia de sesiones y juegos sexuales, alhena brillaba durante las sesiones y era fascinante verlas colaborar para mi placer. Durante los meses que duró fue genial, pero la convivencia siempre nos pone a prueba y terminaron surgiendo complicaciones insalvables.

Los siguientes años la vida me dio algunos palos, pero sigo sintiéndome pleno, rodeado de amor y con buena salud.

Se dice que una relación D/s, avanza o muere, y estoy de acuerdo, lo he podido ver varias veces en ejemplos ajenos. En nuestros once años de relación, alhena y yo nos hemos enfrentado a esos momentos de estancamiento y ha sido ahí cuando el amor nos ha sustentado fuertemente , quizás esta es la mayor de sus ventajas, pues nos ha permitido relajarnos en espera de que vuelva la primavera... porque la primavera siempre vuelve.


_________________


PD. Yanae y chiki han seguido avanzando en su relación D/s de forma lenta, constante y sin demasiados sobresaltos. Llevan juntos catorce años.

Comentarios